Los alimentos que ingerimos afectan a nuestra salud en gran medida. Hoy en día hay numerosas dietas y también consejos de alimentación, empezando por la alimentación vegana, hasta la dieta para ganar masa muscular o la alimentación cetogénica, con un estricto régimen bajo en carbohidratos. Pero a mi personalmente no me gustan las dietas. Hace años que he renunciado a la comida rápida y las supuestas «comidas precocinadas saludables», aunque se hagan llamar saludables, pocas en realidad lo son. También a los alimentos procesados, alimentos que contengan azúcar y bebidas con gas. Así consigues que los kilos vayan desapareciendo casi solos y las papilas gustativas se sensibilicen de forma natural.
Cuando hago la compra para mis menús semanales equilibrados, miro la letra pequeña. Los productos deben ser lo más naturales posible y no contener aceite de palma, lo cual no siempre es fácil. Lo que menos recomiendo es privarse de algún placer. La vida puede y debe ser disfrutada. Por eso me encanta cocinar cosas que me apetezcan. Y a veces simplemente me apetecen unas patatas fritas o algún postre. Estas comidas ambién tienen cabida en mi menu sano semanal. Mi postre favorito es el pastel de chocolate sin gluten. Y, cuando tengo compañía, me gusta disfrutar de una o dos copas de vino. Pero después de un día de excesos, recurro a una de las pocas dietas que no es para mi una dieta: la dieta de ayuno intermitente y reduzco la ingesta de calorías, y procuro prepararme comidas que no engordan. Y en estos días un Clu Lean Shake siempre ayuda. Suelo mezclar el batido con otros ingredientes para que sea diferente cada vez, y que me sacie durante 3-5 horas.
Esta es mi receta favorita con Clu Lean Shake
Remojar copos de avena, semillas chía & nueces durante la noche en leche vegetal y skyr o requesón (por su gran contenido de proteínas). Después de 16-20 horas en ayunas, mezclo el CluYou Shake con 4-6 trozos de plátanos o aguacates congelados. Esta potente combinación del batido con la mezcla de avena es deliciosa y sacia durante (casi) todo el día. Si luego tengo más hambre, tomo un poco de verdura asada al horno o salteada al wok.
Cuando me apetece algo dulce, preparo manzanas caramelizadas con máx. dos cucharaditas de azúcar y vinagre de manzana. Las mezclo con skyr o requesón y las sirvo con canela. Intenta que tus menus semanales equilibrados sean variados. De esta manera te cuidarás sin sentir que estás haciendo dieta.
