Categorías
Balance de tu cuerpo

Automotivarse y autodisciplinarse: Mi experiencia como instructora de deporte

Tiempo de lectura: 2 minutos

Una y otra vez me preguntan cómo puedo motivarme para hacer deporte (casi) todos los días durante esta epoca donde no hemos podido viajar ni movernos como quisiéramos.

La Automotivación

El deporte me ha acompañado desde muy joven. Ya de niña practicaba deportes ecuestres.  Gracias a la autodisciplina y a la fuerza de voluntad, puede alcanzar mis metas y objetivos con bastante éxito. Fui campeona de pruebas juveniles de Indonesia, campeona de doma indonesia y miembro del equipo ecuestre de los Juegos del Sudeste Asiático en el 1993 en Singapur. Esta experiencia me ha ayudado durante toda mi vida desde entonces, porque no sólo en el deporte, sino también en la vida cotidiana, en la familia y también en la vida profesional, uno siempre se enfrenta a retos. Y a menudo lo que se requiere básicamente para lograr con éxito las propias metas es perseverancia y fuerza de voluntad.

Normalmente no necesito ningún estímulo externo para hacer deporte o para moverme activamente, ya que el deporte ha sido también una fuenta de diversión para mí. Estoy agradecida por poder ser tan activa a mi edad, agradecida por tener un cuerpo sano, desafiarme a mí misma cada vez. Y este disfrutar del deporte , junto con apreciar sus beneficios ha contribuído a mantenerme disciplinada y motivada en la práctica de ejercicio en mi vida diaria. Además, en muchas ocasiones, me ha ayudado mucho cuando me ha faltado motivación, ver el ejercicio y el deporte como una competición contra mí misma, que por supuesto quiero ganar.

Autodisciplinarse y organizarse para hacer un poco de ejercicio cada día

Dependiendo de mi horario, reservo entre 30 minutos y 2 horas al día para hacer ejercicio. No siempre es un entrenamiento Lagree (pero al menos 3-4 veces a la semana), a veces es sólo un poco de estiramiento o una sesión de yoga, a menudo un paseo corto pero rápido en bicicleta o incluso sólo un paseo – lo principal es el ejercicio.

No veo el deporte como una actividad de ocio, sino como una inversión en mi propio cuerpo, en mi propia salud. Se ha demostrado que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, a despejar la mente y a recuperar la fuerza, y según un estudio también reduce significativamente el riesgo de demencia, por lo que es bastante beneficioso para la salud física y mental.

Motivación intrínseca y extrínseca

Para los que carecen de motivación intrínseca (es decir que necesitan más ayuda de afuera para ser disciplinados con el ejercicio), les aconsejería que anoten en su agenda una cita diaria para hacer ejercicio y que empiecen poco a poco con sesiones de 20 a 30 minutos, aumentando cada semana para que se sientan satisfechos de sus progresos cuando puedan aguantar 10 segundos más una tabla, por ejemplo.

También puedes motivarte de forma extrínseca, por ejemplo, regalarte una recompensa cuando alcances un determinado objetivo, hacer deporte junto a tu pareja o un amigo, esto es divertido y conecta. Muchas veces el motivarnos unos a otros entrenando en grupo es muy beneficios. Contratar a un buen entrenador que con palabras motivantes y una rutina guíada te ayude a conseguir tu mejor tus metas personales, es también una muy buena opción. Todo se vale. Prueba y observa lo que más te funcione a ti.

Mi frase motivadora es: «Los músculos se construyen durante el descanso – date un día de descanso, alterna entre el entrenamiento de cardio y el de fuerza».

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *